Durante la primera Conferencia Mundial de Mujeres Parlamentarias, líderes de distintos países reflexionaron sobre el papel de las mujeres en la construcción de un mundo más justo e igualitario. En este foro, se planteó la importancia de destinar recursos a la educación y la justicia para niñas como una vía para fortalecer la paz y la equidad social.

Desde México, se destacó la necesidad de priorizar el bienestar de las niñas a nivel global. Se propuso que una parte de la inversión mundial en armamento se redirija a iniciativas que fomenten la justicia, el acceso a la educación y la igualdad de oportunidades, promoviendo así un entorno más inclusivo y libre de discriminación.

México también fue reconocido como un referente en paridad de género. Actualmente, la mitad de los escaños en el Congreso de la Unión y los congresos estatales son ocupados por mujeres. A partir de septiembre, el país dará un paso más hacia la equidad con la integración del Poder Judicial, donde la mayoría de los nuevos miembros de la Suprema Corte de Justicia serán mujeres.

En el evento, que reunió a 350 legisladoras de 62 países, se destacó el compromiso de distintas naciones para garantizar la igualdad en espacios de decisión. La presidenta de la Unión Interparlamentaria, Tulia Ackson, subrayó que México es un ejemplo de cómo la paridad puede convertirse en norma, reflejando avances significativos en la participación política de las mujeres a nivel global.