Con el objetivo de mejorar la conectividad y la seguridad en las carreteras, la gobernadora Mara Lezama sostuvo una reunión con autoridades del sector para dar seguimiento a diversos proyectos de infraestructura vial en el estado. Durante el encuentro, se abordaron planes estratégicos para optimizar la movilidad y fomentar el desarrollo equitativo en la región.

Entre los proyectos clave se encuentran la carretera Cancún–Isla Blanca, los retornos a desnivel en el Bulevar Colosio y la ampliación de la carretera 180D, que conecta con la estación de pasajeros del Tren Maya. También se destacó la construcción de pasos a desnivel en la carretera 307, en los tramos de Petempich y Crococun, así como la atención del socavón y el mantenimiento de carreteras federales, especialmente la 307, que une Chetumal con Cancún.

En cuanto a la red estatal, Mara Lezama subrayó la importancia de reactivar el programa de carreteras alimentadoras, lo que permitirá rehabilitar y reconstruir caminos esenciales como Kantunilkín-Chiquilá, Presumida-Puerto Arturo, el acceso al Ingenio San Rafael Pucté y Bacalar-El Suspiro. Además, enfatizó la necesidad de garantizar señalética adecuada en todas las vías intervenidas.

Uno de los proyectos más relevantes en la zona norte es la construcción del puente Nichupté, una obra que mejorará la conectividad hacia la zona hotelera de Cancún y reducirá los tiempos de traslado para miles de trabajadores, permitiéndoles pasar más tiempo con sus familias. Asimismo, el corredor Cancún-Isla Blanca impulsará el desarrollo turístico bajo un enfoque de sustentabilidad y planificación territorial.

Por su parte, el titular de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, Jesús Antonio Esteva, aseguró que se dará prioridad a los recursos disponibles para atender las principales necesidades del estado, fortaleciendo el programa de mantenimiento y conservación de la red carretera.

El encuentro contó con la participación de autoridades estatales, quienes reafirmaron su compromiso con el desarrollo de una infraestructura moderna y eficiente que contribuya al bienestar de la comunidad y al crecimiento sostenible de la región.